Piumato con Ari Paluch en Pulso Compartido #Tucumán

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    Ago 30, 2015
    No había que esperar pasar un bochorno como el de Tucumán para darse cuenta de que el sistema de elecciones en urna no funciona. En CABA, Salta y Tierra del Fuego hemos vivido ya cuatro elecciones y la diferencia del voto de boleta electrónica marca una clara diferencia.

    Seguir con la 'boleta higienol' de 74 metros tiene que ver con el reflexionar sobre legitimar la voluntad popular. No se puede expresar la voluntad popular de esa forma.

    Yo hace mucho tiempo me sumé al voto electrónico, fui observador internacional en las elecciones de Venezuela, que ganó Chavez, en el 2006. Ya entonces dije que el sistema era perfecto, brillante. No sólo lo dije yo, en ese momento estuvo el Centro Carter junto a otras instituciones e inclusive la oposición argentina: Pinedo, Bullrich y más allá de su postura opositora coincidieron en que el sistema electoral era perfecto; inclusive mucho más que el de EEUU.

    Yo creo que hoy en #Tucumán lo que ha quedado al descubierto es la expresión de las denuncias, la bisagra y gota que rebalsó el vaso. Hay que tener claro que si no hay transparencia en el acto electoral no hay democracia.

    En lo que se viene hay que distinguir el fondo y la forma. Hay muchas cosas que ha hecho este Gobierno que son un disparate y lo serán para el que viene si las mantiene, como las reformas en la Justicia. Y el sistema electoral es eso. Que esto sirva para transparentar no sólo frente a esta contienda electoral sino para el futuro. Esto beneficia a toda la sociedad argentina más allá de quién gane. Esto en cuanto a forma.

    En cuanto al fondo de la cuestión la Argentina necesita un cambio. Hay temas centrales en la sociedad argentina que necesitan respuesta. Para saber quién expresa mejor el cambio hay que ir a los problemas y ver qué dice cada candidato:

    - corrupción: en los '90 pensábamos que ya habíamos llegado al techo, que más corrupción no podía haber, y se demostró que  siempre puede haber más.
    - narcotráfico: cada vez más ligado a la corrupción. Hoy están hermanados y es un desastre para el futuro de la sociedad argentina.
    - pobreza
    - hambre

    Veamos qué dice cada candidato de esto. Hoy no estamos en la situación de crisis terminal que tenía la Argentina pero tenemos otros dramas que no estaban en el 2001. La pobreza estructural, el narcotráfico, etc.

    "Es peor la marginación de hoy que la del 2001" porque hoy están los excluidos a los que se les prometió salir y no lo hicieron, y tienen resentimiento. Eso se ve incluso con la juventud marginada que actúa mucho más violentamente que antes, hasta con odio social.  Y también los mal incluidos, que tienen trabajo estable pero no les alcanza para vivir o los jubilados que reciben sumas miserables.

    Las palabras están mal expresadas porque peronismo es #JusticiaSocial y yo como peronista me identifico más no con aquel que se diga peronista sino con aquel que defiende la Justicia Social porque no me puede hablar de progresismo o peronismo un Gobierno que mantiene las leyes de la Dictadura Militar: la ley de entidades financieras -diseñada por Martínez de Hoz para una Argentina de especulación no de producción-; leyes laborales como la de Tercerizados.

    Esta es la Década Perdida, pero tremendamente perdida porque perdimos muchísimo tiempo, tuvimos todas las variables internacionales jugando a favor de la Argentina y no hicimos una política de cambio profundo.
    Hoy, más allá del relato, no producimos nada en la Argentina, ensamblamos pero no producimos.

    El tema de los DDHH no es una foto, es una película. Acá lo quieren hacer pero como una mala foto: se juzgaron a los genocidas, y estamos todos de acuerdo en eso,  pero se mantienen las leyes que esos genocidas hicieron y que por aplicar esas leyes y ese modelo de país hicieron ese genocidio.
    Los militares no eran unos locos que salieron a matar por locura, era para aplicar un modelo económico y esas leyes están vigentes.  Esa es la foto distorsionada.
    Pero la realidad es hoy que los DDHH son los pueblos originarios reclamando un diálogo con el Gobierno por sus tierras, son los 3 millones de hambrientos, es ese hambre y la marginación, la pobreza, el desempleo, la precarización laboral, la falta de vivienda, la falta de agua, la falta de educación, la falta de salud, etc.

    Y LO QUE VIENE ES JUSTICIA.
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