¡REPUDIAMOS LA BRUTAL REPRESIÓN!

El día de hoy no pasará a la historia como un día más de lucha por la dignidad de los trabajadores judiciales y la independencia de este Poder del Estado.

Pasará a la historia por la innecesaria represión sufrida, implementada por la Ministra de Seguridad Patricia Bullrich, que una vez más emplea las Fuerzas del Estado para intentar callar la voz de aquellos que no nos dejamos amedrentar ni estamos dispuestos a resignar ninguno de nuestros derechos. Mientras tanto narcos y delincuentes de fiesta.

Finalizado nuestro pacífico banderazo de los martes en el 4to piso del Palacio de Justicia, fuimos dura e innecesariamente reprimidos por las Fuerzas de Seguridad que, sin mediar provocación alguna, se ensañaron a golpes con quienes nos manifestábamos, para luego rociarnos a mansalva con gas pimienta. Palos, amenazas, armas largas, balas de goma y gas, mucho gas.

Fueron varios los compañeros/as heridos, entre ellos nuestro Secretario General, compañeros miembros de la Comision Directiva y delegados/as de los distintos Fueros y Ministerios Públicos.

Represión que -reiteramos- no tiene justificativo por cuanto ya nos estabamos retirando sobre la vereda de Plaza Lavalle.

Pateticamente, no conformes con eso, al momento de querer los heridos trasladarse a distintos nosocomios para ser atendidos, volvieron a reprimir. Nuevamente golpes, palos, gas pimienta.

En estos momentos una veintena de compañeros están siendo atendidos en el Instituto de la Visión producto de las lesiones provocadas en los ojos por el gas pimienta.

Muchas compañeras, tras ser atendidas por el SAME primero, junto con otros heridos, y por el Instituto de la Vision después, están ahora en el IADT a raíz de las quemaduras sufridas en la cara y en el pecho producto del gas nefasto.

Esta represión sin asidero de Bullrich lejos está de sojuzgarnos. No nos van a someter utilizando la fuerza de quienes debieran garantizar la seguridad de todos y combatir la delincuencia.

Repudiamos la deleznable violencia implementada contra los trabajadores/as, haremos las denuncias pertinentes, a la vez que reconfirmamos nuestra lucha por el salario, por nuestra dignidad y por la independencia de la Justicia.

Hoy más que nunca seguiremos bregando porque se respeten nuestros derechos, con diálogo, con lucha, pacificamente, como lo hemos hecho siempre, en la convicción que solo mediante ese camino garantizamos la justicia que merecen todos los argentinos.