En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, hacemos un llamado de atención a las autoridades judiciales, a quienes les recordamos en esta fecha, que no sólo tienen el imperativo legal de juzgar con perspectiva de género, sino que además, deben ser ejemplo de ello y fomentar ambientes laborales libres de violencia.
Desde hace muchos años esta organización viene dando batalla contra el acoso y la violencia en el mundo del trabajo, que mayormente sufren mujeres trabajadoras, porque entendemos que la violencia contra la mujer es una violacion a los derechos humanos.
Un día como hoy recordamos e insistimos a la CSJN, que se expida de manera definitiva en el caso del magistrado Juan Carlos Gemigniani, el primer juez sancionado por el Consejo de la Magistratura de la Nación por ejercer violencia de género contra una mujer trabajadora. Sanción que no se encuentra firme, por su dilatoria apelación ante el Alto Tribunal. No se puede esperar más. Debe darse fin a ese procedimiento de manera ejemplar.
Mientras las autoridades no lleven a fondo este y otros casos -que tramitan ante el Consejo y los Ministerios Públicos-, los denunciados seguirán causando daño desde su lugar de trabajo, y perdurando los efectos de sus hechos violentos, produciendo la consecuente revictimización de denunciantes, quienes deben pedirse licencias o pases, afectando su carrera.
Es nuestra responsabilidad que la violencia de género sea erradicada y sus responsables apartados de sus cargos, como ha sucedido recientemente con la suspensión y el jury dispuesto para los jueces que llevaron adelante el caso por el femicidio de Lucia Pérez.
La perspectiva de género NO ES un relato. Administrar justicia, no es burlarse de lo que la ley manda, pues ello resquebraja la confianza pública en la imparcialidad de la justicia y la fe en las instituciones del estado.
Sancionar las violencias e instrumentar medidas de accion positivas generadoras de cambio, -como protocolos de actuación, dispositivos de abordaje de la violencia y medidas de reparación a las víctimas-, son herramientas que nos permiten luchar contra la naturalización de la violencia, mitigar sus efectos devastadores, evitar la discriminación y formentar ambientes laborales libres de violencia contra la mujer.
No se puede tener doble vara, la justicia debe ser el ejemplo.
Buenos Aires, 25 de Noviembre de 2021
COMISIÓN DIRECTIVA NACIONAL