Ayer, hoy y siempre La Marrón

Nuevamente ayer quedó demostrado, como en el devenir de la historia de este gremio, que los trabajadores judiciales sabemos quien nos representa, quien nos defiende y vela por nuestra dignidad.

Desde que la lista Marrón conduce el gremio, hemos tenido en claro que la mejor manera de defender nuestros derechos es fortaleciendo la organización. Por eso siempre nos sometimos a la voluntad de nuestros afiliados, porque estamos convencidos del rumbo y la manera de construir la Unión.
Esto quedó demostrado en las últimas elecciones realizadas en las Comisiones Internas a lo largo del 2013, donde resultamos ampliamente ganadores.

El día de ayer venció el plazo para la presentación de listas para la elección de secretario general y comisión directiva para el período 2014-2018 a realizarse el próximo 15 de abril.

Fuimos testigos de los denodados intentos realizados desde la Procuración General de la Nación, con el apoyo del Gobierno Nacional, tejiendo todo tipo de intrigas palaciegas, con precisas instrucciones dadas a los fiscales, para presentar una lista. No tuvieron reparos de usar el aparato disponible, prometiendo cargos y ascensos, sin importarles en absoluto la “legitimidad” del mecanismo.

Pero no tuvieron en cuenta que los trabajadores no se venden, se reconocen parte de fundamental de la organización y son agradecidos con los que luchan por ellos.
Ni así fueron capaces de armar una lista que enfrente a nuestro actual secretario General Julio Piumato y la comisión directiva de la lista Marrón. De este modo se frustra un nuevo intento de sometimiento de la Justicia y atomización de los sindicatos, sacando del medio a los dirigentes que defienden a sus trabajadores.

Se cumple así lo que advertía el General Perón: ”Que sepan los indignos farsantes que este pueblo no engaña a quien no los traiciona“.

Sabemos que este 2014 será un año de luchas, porque seguirán los intentos de ajuste hacia nuestro salario y nuestras condiciones laborales; pero la muestra de dignidad dada en estos días por los judiciales de todo el país retempló nuestros ánimos y estamos dispuestos mas que nunca a dar la batalla que sea necesaria para continuar luchando por las conquistas obtenidas y  por las que aun faltan.

Por eso, con el vigor y la convicción que caracterizó nuestra historia gremial, seguiremos luchando por una Justicia que sea justa con los que la hacemos y que esté al servicio de todos los argentinos.
Por la Justicia y contra el Ajuste