¡Los Judiciales Marchamos! 7M

Pasado ya  más de un año de la actual gestión, los trabajadores vemos que la situación social empeora cada día. Cae el consumo, el salario pierde frente a la inflación, aumenta la desocupación y no se ven signos de recuperación de la actividad económica y productiva.

A este panorama hay que sumarle que el gobierno, siguiendo a los falsos profetas del neoliberalismo, acusa a los trabajadores y sus organizaciones gremiales de ser los responsables de la falta de competitividad, dados los altos costos laborales. Ahí está el ejemplo del sector docente, al que pretende imponérsele un ridículo techo salarial, mientras se niegan a convocar a la paritaria que corresponde por ley nacional.

Lo sabemos también como judiciales, que venimos luchando contra el TRASPASO DE LA JUSTICIA AL ÁMBITO DE LA CIUDAD, en una maniobra que apunta a DOMESTICAR LA JUSTICIA LABORAL PARA LEGITIMAR LA FLEXIBILIZACIÓN DEL TRABAJO Y MANEJAR A VOLUNTAD LA JUSTICIA PENAL PARA ESCONDER LOS ACTOS DE CORRUPCIÓN.

Por eso estamos presentes hoy en esta marcha. Y todos los judiciales del país realizan asambleas y concentraciones en sus respectivas ciudades. Porque estamos convencidos que el único camino posible para la recuperación de una Patria justa, libre y soberana debe asentarse en la defensa inclaudicable de los derechos de los trabajadores.

El único camino genuino de crecimiento económico y social, es la implementación de una política económica que priorice el desarrollo de un mercado interno fuerte y expansivo, el crecimiento real del poder de compra de los salarios, y el fomento de inversiones productivas que impulsen un plan de infraestructura nacional que atienda a las economías regionales.

Tal como lo expresamos desde la conducción de la CGT,  reclamamos urgentes correcciones en la orientación de la política económica, industrial y comercial del país. Priorizando el sostenimiento del empleo, el crecimiento del mercado interno y el desarrollo industrial.

Venimos, ademas, a solicitar el apoyo y la solidaridad de todas las organizaciones y centrales gremiales, de los movimientos sociales y de todos los ciudadanos para frenar este nuevo intento de manipulación de la Justicia que lleva el nombre de TRASPASO.
Los judiciales sabemos cuál debe ser el rol de la Justicia;  y sabemos que  si no combatimos la corrupción desde adentro y desde afuera, no tenemos destino como país. Se trata de una función crucial del Poder Judicial adjudicada por la Constitución, y una de las condiciones básicas es la independencia de todas las presiones, para de esta manera cumplir integralmente su rol de equilibrio de poderes.  
 
Nosotros queremos fortalecer la Justicia y no debilitarla. Una justicia fuerte es garantía para los humildes; una Justicia débil es garantía para los corruptos y para los delincuentes.
Es una lucha larga y fuerte, y vamos a llevarla adelante las veces que la tengamos que hacer. Por eso traemos aquí nuestra voz y nuestras banderas. Vamos a seguir movilizados en cada fuero, en cada oficina, en cada repartición, hasta que se haga efectivo el respeto a los derechos de nuestro Pueblo, hasta garantizar un mejor servicio de justicia, hasta garantizar el NO TRASPASO y el NO A LA FLEXIBILIZACIÓN LABORAL y la IMPUNIDAD.

Nuestro compromiso es el que sostenemos desde siempre. Como trabajadores y judiciales, vamos a luchar para que la Justicia Social vuelva a imperar en nuestra Patria.