Su estrategia no es “novedosa”, es la misma que utilizó en octubre del año pasado al intentar enfrentar a la sociedad argentina contra los trabajadores judiciales manifestando que “…por servir café y transportar expedientes les pagan $100.000…” y que éramos el problema para lograr una mejor Justicia. Por aquellos meses le demostramos primero en la calle y luego en las jornadas de marzo organizadas por la CSJN –a pedido de la UEJN- sobre reformas en la Justicia, que los TRABAJADORES NO SOMOS EL PROBLEMA SINO SU SOLUCIÓN.
Si bien los judiciales no estamos incluidos en el proyecto de ley de presupuesto para que paguemos GANANCIAS, hoy vuelven a enfrentarnos a la sociedad pretendiendo DIVIDIRNOS, utilizando periodistas afines y grandes medios de comunicación diciendo que para lograr el nuevo acuerdo con el FMI y evitar los problemas de nuestro país, hay que aumentar los ingresos por medio de la aplicación del impuesto a los trabajadores judiciales. Y nada dicen de los que en dos meses fugaron más de 30 mil millones de dólares – récord histórico- agravando la CRISIS de la cual ni los judiciales ni el resto de los trabajadores somos responsables.
La desesperación del Presidente hizo olvidar su promesa de campaña: que en su gobierno ningún trabajador pagaría GANANCIAS y pretende que los TRABAJADORES argentinos entreguen su SALARIO a quienes están saqueando la patria y robando el plato de comida de nuestras familias.
Asimismo, insisten con el TRASPASO a través de un proyecto de ley aparentemente inocuo, mediante el cual traspasarían un fuero inexistente -Defensa al Consumidor- modificando arteramente la Ley Cafiero. Esto les deja allanado el camino para luego fácilmente traspasar los fueros Laboral, Penal, Comercial, Civil, Mandamientos y Notificaciones, Archivo, etc, con simples convenios entre Capital y Nación. En un solo movimiento conseguirían avasallar nuestros derechos y manipular a la justicia para obtener impunidad (Penal), flexibilizar derechos laborales (Trabajo), proteger a la banca usurera (Comercial) entre otros. Un verdadero desastre.
Los trabajadores judiciales luchamos siempre y seguiremos LUCHANDO porque el SALARIO NO ES GANANCIA, porque su naturaleza alimentaria impugna tal gravamen. No vamos a permitir que el AJUSTE lo paguen los trabajadores y que se siga favoreciendo la especulación financiera a costa del HAMBRE de muchos argentinos y del avasallamiento de la justicia.
OCTUBRE DE LUCHA
10 y 11 con un PARO de 36 horas (48 horas en el INTERIOR),
con MOVILIZACIÓN NACIONAL al Congreso de la Nación el día miércoles 10.
LA UNIÓN HACE LA FUERZA