SE FUE TONON. UN TRIUNFO DE LA UNIÓN.

Mediante Res. 511/23, nuestro Máximo Tribunal torna efectiva la salida del infausto Tonón del Directorio de nuestra Obra Social. Salida que -sabemos- es recibida con júbilo por todos/as los judiciales, más allá que su figura ya estaba más que relegada desde hace algunos meses, al punto que no firmaba ningún tipo de resolución ni incidía en ninguna cuestión.

Se cierra así un capitulo nefasto que demandó -especialmente en los últimos dos años- arduas luchas, diversas presentaciones formales de esta Organización y distintas medidas de fuerza y movilizaciones de la que participaron miles de compañeros/as de todo el país.

Nuestro norte siempre fue construir una Obra Social con sensibilidad, menos burocrática, que apunte a la prevención y respete la dignidad de la vida de cada uno de sus afiliados/as.

Por el contrario, durante el periodo sombrío de Tonón, fueron constantes las caídas en las prestaciones, debido al destrato que padecían los profesionales. Los empleados de la Obra Social y los judiciales no éramos los únicos destinatarios de sus bajezas. Imposible olvidar que encarar cualquier tratamiento constituía una tarea titánica y un calvario por la incertidumbre que reinaba en esa época. Muchos compañeros/as dejaron su vida en el camino mientras esperaban respuesta.

Hoy, bajo la nueva Dirección y con la incorporación de una genuina representante de los/as trabajadores/as -la Cra. Maia Volcovinsky- ya se advierten significativas mejoras en la atención y las prestaciones. También se terminaron los aprietes, malos tratos y humillaciones que el nefasto Tonón bajo su régimen de terror supo imponer.

Ganada la batalla contra la burocracia e iniquidad de ese personaje siniestro, es ahora responsabilidad de todos/as construir esa Obra Social de excelencia que nos merecemos, que cuide y proteja a los judiciales y a sus familias.

Hoy es un día festivo y abrimos un nuevo capítulo, en la tranquilidad de saber que en el nuevo Directorio tenemos a alguien nacida de nuestras propias filas, que tiene la mente y el corazón necesarios para llevar adelante las mejoras que los/as judiciales desde hace años venimos reclamando.